Quizá
 la característica más importante de la atmósfera de Marte es su poca 
densidad. Ello hace que la presión atmosférica en la superficie del 
planeta rojo sea aproximadamente una centésima parte de la que hay en la
 Tierra. Por ello un experimento importante para nuestro proyecto es 
cultivar nuestras bacterias en condiciones de baja presión.
Como
 sabéis, hicimos un experimento previo con una cámara de vacío que se 
construyó a partir de un frasco hermético del que se extrajo el aire 
mediante una trampa de vacío conectada a un grifo de agua corriente. No 
observamos diferencias en el crecimiento de las bacterias entre el 
control a la presión de la atmósfera y el de las placas a de las que se 
extrajo aire pero estos resultados no son concluyentes pues no tenemos 
certeza de si funcionó nuestro sistema y, en consecuencia, si alcanzamos
 en el interior del frasco una presión lo suficientemente baja como para
 imitar a la que hay en Marte.
Tenemos
 la posibilidad de mejorar nuestro experimento. Para ello disponemos de 
una bomba de vacío eléctrica que conectamos a un desecador y del cuál 
podemos extraer el aire creando vacío en su interior. Con un par de 
globos hemos podido comprobar que es efectivo el mecanismo pues estos se
 inflan por la presión negativa que creamos en el interior.
Pero
 una cosa es crear vacío dentro de un recipiente y otra que se mantenga.
 Hemos dejado los globos inflados en el interior del desecador y a las 
24 horas no han experimentado un cambio apreciable de volumen. Las fotos
 que se adjuntan están separadas 24 horas y en ellas podemos comprobar 
cómo no ha habido cambios apreciables en el volumen.
Tenemos
 un sistema con el que podemos replicar el ambiente de baja presión de 
Marte. Ahora toca diseñar el experimento. ¿Qué creéis que deberíamos 
hacer? Investigad sobre la atmósfera de Marte y hacer una propuesta para
 nuestros experimentos sobre la supervivencia de nuestras bacterias en 
el ambiente de Marte.

Para nuestras bacterias tuvimos que crear una atmósfera que similase las condiciones de presión atmosférica marcianas que equivaldrian a mas o menos una centesima parte de las de La Tierra. Disminuir la presion sin artilugios específicos no es tarea fácil, para ello, usamos una trampa de vacío que unimos a un tarro hermético y a un grifo que al abrirlo creaba el vacío, como era de esperar, no obsevamos ningún tipo de cambio en las bacterias a baja presión y las bacterias a presion normal terrestre, asique usamos una bomba de vacío que nos proporcionó el laboratorio del instituto, para comprobar si esta funcionaba, introducimos dos globos semihinchados y los sometimos a esa extracción del aire en la cápsula, y esta dio resultados positivos(los globos se inflaron) pero para asegurarnos, dejamos los globos durante un día para ver si se mantenían hinchados y efectivamente, sí.Agira que hemos obtenido estos resultados nos falta ponernos manos a la obra e introducir nuestro cultivo de bacterias en la bomba, someterlo a una disminución de la presión y obsevar su crecimiento diferenciandolo y comparándolo con el cultivo de bacterias que hemos dejado a la presión de la tierra.
ResponderEliminarJulia Martínez Barranco
Tras la preparación del estado de “vacío” del análogo del planeta rojo, deberíamos someter la supervivencia de las distintas bacterias, en sus correspondientes placas de Petri, a estas condiciones y comparar su tasa de supervivencia con la de las condiciones terrestres.
ResponderEliminarLos resultados serán positivos si la diferencia es escasa o inexistente; supondrán un punto más en la posibilidad de vida en Marte.
Si por el contrario la diferencia es notable, si las bacterias ven muy reducida su población en las condiciones de vacío, significará que su supervivencia en el planeta rojo es una posibilidad muy remota.